El martes 16 de octubre una noticia conmocionó al mundo del futbol femenil: Carolina Jaramillo posteó en todas sus redes sociales una imagen donde aparecía junto a Mar Ibarra y un moño negro en señal de luto, la foto estaba acompañada del mensaje «fuiste, eres y serás la mejor entrenadora que tuve, descansa en paz, te amo, Mar», lo que de inmediato desató una serie de reacciones entre aficionados, jugadoras y medios de comunicación, y es que la tijuanense, desde hace ya algunos años, se convirtió en una de las impulsoras por excelencia del futbol femenil. La muerte de Mar Ibarra ha unido al gremio del balompié, que se volcó en mensajes de cariño y tristeza por su partida.
¿Quién era Mar Ibarra y por qué su pérdida ha golpeado tanto al mundo del futbol femenil?
Ibarra rompió paradigmas en el deporte mexicano. Todo comenzó cuando en Tijuana creó su equipo Isamar FC, mismo que en la ciudad dio cátedra de buen futbol y como coloquialmente se dice en este deporte «la rompió» durante varias temporadas. A aquella escuadra llegaron las hermanas Verónica y Karla Pérez, quienes no tenían mucho en la ciudad y buscaban un espacio para jugar, espacio que encontraron en el equipo de Mar, que de inmediato las cobijó e impulsó a ser mejores como a muchas futbolistas más.
Después de este club, las aspiraciones de la entrenadora fueron creciendo, y entonces en el 2014 logró uno de sus tantos sueños: reunió a su camada de talentosas jugadoras y lanzó la propuesta al Club Xoloitzcuintles de contar con su rama femenil, así nacieron las Xolas, quienes de la institución, en ese momento, tenían el nombre, el uso del estadio Caliente, los uniformes y, la cereza del pastel, el pago de la inscripción a la Women’s Premier Soccer League (WPSL) de Estados Unidos, un hecho histórico para el futbol femenil mexicano, pues se convirtieron en el primer club que se atrevía a jugar en una liga que estaba del otro lado de la frontera.
Fue así que Mar Ibarra comenzó a escribir su historia en el deporte mexicano, con base en esfuerzo por sacar adelante a sus Xolas, a quienes incluso llevó a una gira por España donde enfrentaron a Atlético de Madrid, Levante y Valencia. Sin duda, las metas de la estratega siempre fueron altas y no se cansó de buscar oportunidades para que el futbol femenil se desarrollara todavía más.
Su último gran proyecto fue la Fundación Ellas Juegan, a la que invitó a jugadoras de la Liga MX Femenil como Lucero Cuevas, Esmeralda Verdugo, Fabiola Ibarra, Nancy Antonio, Nayeli Rangel, Mabel Ramos y la misma Jaramillo junto a las hermanas Pérez. «Es una fundación que va a apoyar a las jugadoras que quieran ir a probarse a los diferentes equipos, aquí no hay camiseta, el chiste es que el futbol femenil siga creciendo (…) se les van a conseguir viáticos. Yo fui jugadora amateur y sé lo que se carece, lo que se necesita y sé que los sueldos no son lo suficiente como para que vivan bien y sean profesionales», declaró en una entrevista para este portal hace unos meses.
Mar creía firmemente en la Liga MX Femenil y en los alcances del balompié mexicano a nivel nacional e internacional, estaba segura que vería cómo sus sueños se hacían realidad, y es que ella no sólo se quedaba en la fantasía, sino que actuaba para impulsar al deporte azteca.
Las reacciones
La muerte de Mar Ibarra ha dejado ver cuánto se le apreciaba, no sólo entre jugadoras, sino entre la afición en general, que ya la identificaba como una activista que luchaba por la equidad de género. Algunas de las reacciones que ha habido en redes sociales son las siguientes:
Fabiola Ibarra, una más de las jugadoras a quien Mar impulsó, al creer en su talento y proyectarla a clubes, no pudo ocultar su tristeza: «Aún no me lo puedo creer, quisiera que todo esto fuera un mal sueño, pero sólo Dios sabe el porqué (…) me quedo con todos los bonitos momentos que viví contigo y por todo lo que hiciste por mí te estaré eternamente agradecida (…) siempre confiaste en mí y siempre tuve tu apoyo, eso jamás lo olvidaré», escribió la delantera de Atlas en sus redes sociales.
Asimismo, Ana Gabriela Paz, portera de las rojinegras, expresó su sentir en Twitter: «hoy se nos va una gran persona que siempre luchó por el futbol femenil, siempre apoyó, y siempre peleó por la igualdad de género… hoy puedo decirte que tu lucha no es ni será en vano, seguiremos insistiendo así como tú lo hiciste para que esto siga creciendo».
También Zoé Tapia, de Gallos, compartió un mensaje en su cuenta de Twitter: «dejas un legado y una trayectoria impresionante. Tu dedicación al futbol femenil siempre será recordada. Eres y serás un ejemplo a seguir para muchas jugadoras. Gracias por siempre creer en el futbol femenil y en las jugadoras. Te recordaremos siempre».
Por su parte, Mabel Ramos compartió parte de la entrevista que le hizo para su libro Enfoque de psicología deportiva orientada al futbol femenil: «la mentalidad de una mujer se sobrepone a muchas adversidades, a muchos rechazos, muchos estigmas, y eso en vez de alejarlas del futbol, les sirve de motivación (…).
«¿Qué es lo que te mueve a trabajar en el futbol femenil?, la cuestionó Mabel, «la pasión por el deporte, la pasión por buscar que nosotras las mujeres tengamos más oportunidades de desenvolvernos en un deporte tan complicado como el futbol, no por lo deportivo, sino por las complicaciones a nivel social».
Descanse en paz Marbella Ibarra.